Peugeot 308 CC: Dualidad perfecta

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Los amantes de las formas futuristas en los coches coupé y apasionados de los cabrios tienen en el Peugeot 308 CC su coche ideal. Es espectacular en su diseño, funcional gracias a la capota rígida y a sus cuatro plazas reales y divertido al volante, así que lo tiene todo para convertirse en uno de los cabrios con más éxito en el segmento de los coches medios.

 

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EXTERIOR

 

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Sólo hace falta mirarlo para darse cuenta que Peugeot ha puesto un gran empeño en el diseño de este descapotable. Es precioso tanto con la capota abierta como cerrada. La línea claramente coupé, una parte trasera única y con mucha personalidad, marcada por una parrilla negra que no deja ver el tubo de escape y el morro afilado, agresivo e indudablemente con la huella que marca tendencia en la marca del león. Llaman la atención los pilotos traseros, con unas marcadas líneas verticales que cambian de intensidad si funcionan como luz de posición o como luz de freno. Este nuevo diseño aumenta la iluminación y le da un toque muy especial a la parte trasera del vehículo.

 

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El techo retráctil en dos partes tarda unos 20 segundos en abrirse o cerrarse y lo puedes hacer circulando hasta a 12 km/h, algo que se agradece si nos sorprende una pequeña tormenta y vamos circulando por la ciudad. Destaca la gran luneta trasera que llega casi por encima de la cabeza de los pasajeros de los asientos traseros, lo que le da amplitud y mucha luz al interior del coche. Mientras estamos descapotando el coche podemos ver el proceso en la pantalla interior.

 

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INTERIOR

El 308 CC es una cuatro plazas real, aunque es evidente que personas muy altas no van demasiado cómodas en las plazas traseras, sobre todo si llevamos el coche capotado. Aun así acceder a estas plazas es fácil gracias a que se deslizan los asientos hacia adelante, además en la versión que éstos se regulan eléctricamente, lo hace el propio asiento sólo. Los asientos son bastante deportivos, en la unidad probada son de piel, realmente envolventes y a la vez cómodos. Destaca el sistema «airwave», una pequeña rejilla que se situa a la altura del cuello que saca aire caliente. Es un buen complemento a la calefacción normal y a la de los asientos, ya que permite viajar descapotados aunque las temperaturas no sean muy cálidas. Eso sí, este sistema sólo lo llevan los asientos delanteros.

 

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Realmente el 308 CC ha ganado en calidad y diseño en el interior respecto a su versión anterior, el 307 CC. Se puede escoger una versión en la que todo está rematado en piel, no sólo los asientos si no también el salpicadero y el recubrimiento de las puertas. La consolo central ha evolucionado, no está tan cargada de botones y tiene una imagen más práctica y actual. Tiene una pantalla, que se cierra automáticamente al sacar la llave del contacto, con toda la información necesaria.

 

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En cuanto al maletero, podemos decir que es correcto. Con el coche capotado tiene una capacidad de 465 litros, si lo descapotamos se reduce a 266 litros. Hay que tener en cuenta que esto permite llevar un pequeño equipaje. Además, si viajan cuatro pasajeros hay que guardar en el maletero el cortavientos que en este caso se dobla en cuatro partes para facilitar su transporte.

 

MOTOR

Dispone de tres motores diésel y dos gasolina. Los gasolina son un 1.6 16v THP de 150 CV con caja de cambios automática  de 4 velocidades o con cambio manual de 6 velocidades. El otro gasolina es también un 1.6 VTi de 120 CV con cambio manual de 5 velocidades. El más potente tiene un consumo mixto, según datos oficiales de 7,5 con cambio manual, mientras que el automático alcanza los 8,1 litros a los 100. El motor más pequeño hace un consumo mixto de 7,1.

 

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Por su parte los motores diésel son un 2 litros HDI de 140 CV FAP con cambio manual de 6 velocidades, o el mismo motor con 136 CV pero con cambio automático de 6 velocidades. En este caso el consumo del manual es realmente competitivo, ya que la marca lo situa en 5,9 litros, mientras que el automático alcanza los 6.8 litros a los 100. La gama diésel se completa con un 1.6 HDI de 112 CV FAP, con el cambio manual de 6 velocidades y un consumo mixto de 5,3 litros.

 

CONDUCCIÓN

 

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Subirse al 308 CC es todo un placer. Es divertido pasear con él por carreteras reviradas, donde se muestra seguro y estable tanto capotado como descapotado. És agil y se puede viajar en él con seguridad y aplomo ya que va bastante pegado a la carretera, además sin capota y viajando por vias rápidas no se notan ni turbulencias ni ruido excesivo, lo que permite mantener una conversación con el acompañante. Cuando lo llevamos capotado es bastante sólido y actua como un coupé, no notamos las vibraciones que generan algunos descapotables, lo que demuestra el buen encaje del techo rígido. La unidad que hemos probado llevaba el motor diésel con cambio manual, un motor conocido ya por el grupo PSA y que asegura una buena respuesta de reacción y un consumo ajustado.

 

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PRECIO

La versión gasolina parte desde los 26.600 el de 120 CV en su versión básica hasta los 32.200 el automático de 150 CV con el Sport Pack. Los diésel están a la venta por 28.500 el de 112 CV hasta los 35.000 euros el de 136 CV con cambio automático y el Sport Pack.

 

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A FAVOR

* una línea que atrae miradas

* en la calidad de los acabados y el equipamiento se acerca a las marcas premium

 

EN CONTRA

* pocas opciones de configuración

* el motor diésel es algo ruidoso

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