Escrito por Mercè Rivas / Fotos de Rubén Bernal
El BMW M6 es un coupé de lujo que hace sentir cosquillas en el estómago al conducirlo. Una mezcla de lujo, potencia, deportividad, exclusividad y sofisticación que la marca bávara ha sabido conjugar a la perfección creando un bólido que es imposible no mirar cuando uno pasa por su lado. Su imagen es espectacular y su corazón una bestia indomable digna de los deportivos más potentes del mercado.
EXTERIOR
La línea de este coupé de 4 plazas habla por si sola. Es uno de los coupés más bonitos y espectaculares que circulan por nuestras carreteras. Sus dimensiones quedan paliadas por el material de construcción, el aluminio, que reduce su peso. El frontal es increiblemente agresivo y elegante a la vez. Destacan sus grandes tomas de aire y los faros, muy distintos al resto de la gama BMW.
Además el diseño lateral marca un trazo con un aire extremadamente aerodinámico y deportivo que caracteriza a los diseños M. Las llantas de cinco radios dobles también llaman la atención, son de 19 pulgadas y han sido diseñadas especificamente para este coche.
Si lo miramos por detrás destacan los 4 tubos de escape y el gran ancho de via del coche. Podemos observar los pasos de rueda que realzan aún más la agresividad del diseño de este coupé. Es indispensable observar el techo construido en fibra de carbono, además de las ventajas estéticas, el techo del M6 destaca por su bajo peso y la velocidad que esto le genera a la conducción. Sólo con mirarlo nos damos cuenta del dinamismo y la fuerza de su diseño.
INTERIOR
Si la parte exterior del M6 combina elegancia y deportividad el interior va a juego. Cuando nos subimos al M6 notamos que se trata de un coche con una conducción extremadamente deportiva. Sus asientos M nos recogen a la perfección gracias a todas las regulaciones de las que dispone y nos hace sentir como un piloto de Gran Turismo.
Destaca también la iluminación en blanco de los interiores, sobre todo el cuadro de mandos. El equipamiento es espectacular y no le falta ningún detalle. Los materiales son de gran calidad y eso se puede ver a simple vista. Sin lugar a dudas elegancia, comodidad y deportividad encajan como un puzzle en el interior del M6.
El M6 coupé es un 4 plazas que sorprende por la amplitud de sus asientos traseros dentro de los coches de su segmento. Y por sus dimensiones el maletero nos permite cargar todo lo necesario.
MOTOR
El tesoro más grande de este coupé se encuentra bajo el capó. Su corazón indomable lo hace espectacular. Monta un motor de 5 litros V10 de 507 CV, uno de los más potentes del mercado, y el mismo que lleva el M5. Con este motor se pueden superar las 7.000 rpm y tiene el par máximo en 520 Nm, un lujo de empuje y potencia. Es un motor muy ágil que responde con sólo tocar el acelerador. Su sonido ronco es una delicia para los amantes de los deportivos.
CONDUCCIÓN
Más que conducir, las prestaciones del M6 hacen que nos parezca que pilotamos. La relación entre su potencia y su bajo peso, gracias al aluminio y a la fibra de carbono, hacen que el coche prácticamente vuele. Podemos decir que la sensación de conducción es tremenda, responde en el mismo momento en el que le pedimos velocidad y agilidad. Acelera de 0 a 100 en tan solo 4,6 segundos. Además de ser rápido es como una tabla, tanto en vias rápidas como en carreteras reviradas. Es alucinante la entrada en curva de este coche pese a sus dimensiones y es espectacular el empuje que da la tracción trasera, además destaca el perfecto reparto del peso entre los ejes delantero y trasero. Aunque si de verdad queremos comprobar hasta donde es capaz de llegar esta bestia hay que desconectarle el control de tracción y estabilidad.
Una de las características comúnes a toda la serie M de BMW es la posibilidad de variar la potencia con sólo pulsar el botón M situado en el volante. Pulsado, el motor rinde su potencia máxima, en el M6, de 507 CV. Si optamos por no activarlo, el motor «sólo» nos dará 400 CV, potencia más que suficiente para seguir moviendo con agilidad el coche y ayudando a mejorar el consumo.
Otra de las ventajas de conducción que le da juego al conductor es la posibilidad de variar la suspensión con un simple botón situado al lado de la palanca de cambios. El Control Electrónico de Amortiguación (EDC) nos permite llevar la suspensión más dura, lo que nos lleva a una conducción más deportiva y en largos viajes la podemos ajustar a una suspensión un poco más blanda lo que genera una mayor comodidad a los pasajeros.
Y para acabar de completar la conducción extra deportiva de este BMW, su cambio SMG Drivelogic de 7 velocidades nos permite elegir entre las levas al volante o la palanca de cambio. Se trata de un cambio rapidísimo sin notar el engranaje de las marchas, no reduce la velocidad ni necesita disminuir la potencia del motor. Un cambio que se adapta a nuestra conducción y al estado de la calzada.
Cuando un coche acelera de la manera que lo hace el M6 es imprescindible que su sistema de frenado sea igual de efectivo y rápido. Y en este BMW esa dualidad se consigue a la perfección. Lleva frenos de disco Compound, que le otorgan una rápida frenada aún a altas velocidades. Completan la seguridad de frenando los neumáticos especiales para una conducción a alta velocidad.
PRECIO
El M6 es un lujo al alcance de unos pocos. Su precio de salida son 124.600 euros.
A FAVOR
* Su indiscutible belleza
* Su potente motor
EN CONTRA
* El precio. Solo accesible a unos pocos
* Su alto consumo. Aunque la marca asegure que tiene un consumo mixto de 14.3 litros
